Arata defendió la Emergencia Social en la Provincia, pero aclaró que “no hay nada para celebrar”
En una extensa sesión extraordinaria, la Cámara de Diputados bonaerense aprobó ayer las leyes de Emergencia Social, Económica y Productiva y Energética, solicitadas por el gobernador Áxel Kicillof.
Desde la Cuarta Sección Electoral, la diputada juninense del Frente de Todos, Valeria Arata, expuso durante largos minutos la posición de su bancada acerca de la normativa que le otorga al gobernador la facultad de reasignar partidas presupuestarias, congelar tarifas por 180 días, revisar contratos con el sector público, así como también rediscutir deudas con proveedores y bonistas.
Desde su banca, Arata argumentó que Kicillof avanzó en una decisión política que debió haber adoptado su predecesora, María Eugenia Vidal, y reconoció que, con la sanción de una Emergencia, “no hay nada para celebrar”. “Cuando las cosas duelen de verdad, es el primer paso que debió haber tomado la ex gobernadora Vidal. Detrás de los números del desempleo y la inflación, hay familias que perdieron el trabajo, que no pueden pagar las tarifas”, expresó la diputada de Junín.
“En los últimos años, ha aumentado la cantidad de pibes y pibas de a Provincia que asisten a los comedores. En 2017 era el 16%; 2018 era el 35%; y a principios de esta año, hablamos de un 40%. Es decir, cinco millones y medio de bonaerenses debajo de la línea de pobreza”, insistió.
Y agregó: “No hay nada para celebrar, tenemos una inflación acumulada 276% de 2015 a la fecha, una devaluación del 508%, una pobreza 40,8%, indigencia del 9,5% y un desempleo 10,6%. El gobierno necesita esta herramientas para poder sacar adelante esta Provincia”.