Fernández reasumió en el PJ con un duro mensaje: “Quisieron sacarme de la cancha, pero no me quebraron”
El ex intendente de Lincoln, Jorge Abel Fernández, asumió ayer nuevamente como presidente del Partido Justicialista (PJ) del distrito, en un acto en la Unidad Básica de Monseñor Surce y Pellegrini, en coincidencia con el 103° aniversario del natalicio de Eva Perón.
Acompañado por un grupo de militantes y por el senador provincial del Frente de Todos, Walter Torchio, el ex jefe comunal entre 2003 y 2015 volvió con un duro discurso, en el que recordó su situación procesal, cuando estuvo detenido con prisión domiciliaria en el marco de una investigación por presunta defraudación a la administración pública durante su gestión, y aseguró que intentaron “sacarlo de la cancha”, con “dos años de vacaciones forzadas”.
Previamente, el senador Torchio felicitó a Fernández y sobrevoló la situación de crisis económica que vive el país, pero pidió por la continuidad del Frente de Todos en el gobierno, de cara a las elecciones de 2023. “Quiero agradecerle a Jorge y felicitar a la nueva conducción, no dejen de transmitir esperanza y optimismo, porque lo mejor está por venir, de la mano del justicialismo”, expresó.
Luego, llegó el momento de Fernández, quien recordó el aporte al PJ local de dirigentes históricos como Alfredo Eder, Osvaldo Bracchi o Jorge Chévez, entre otros.
Actualmente en un cargo en el Ministerio de Seguridad nacional, el ex alcalde defendió al gobierno de Alberto Fernández y señaló las dificultades que debió atravesar por la pandemia de COVID-19.
“No tenemos que tener miedo de debatir, porque hemos dado todo, muchas veces es difícil de entender lo difícil que es para un gobierno hacerse cargo de algo que nadie hubiese esperado”, aseguró.
“¿Por qué no miramos más al prójimo? ¿Por qué muchas veces no nos damos cuenta de que si le va mal al de al lado, nos va mal a nosotros? Tenemos que hablar de más peronismo, de más entrega, de más amor”, exclamó.
Luego, señaló que, tras su salida del poder en 2015, tras la derrota electoral con el actual intendente radical, Salvador Serenal, reconoció que se alejó transitoriamente de la actividad territorial y lanzó acusaciones, sin destinatarios específicos, por el procedimiento judicial en su contra.
“Hacía seis años que no hablaba con la gente, incluso me mandaron dos años de vacaciones forzadas, quizás para sacarme de la cancha o para quebrarme. Yo les quiero decir que no me quebraron”, afirmó.