Según la UCR, los salarios de los municipales de General Pinto son “los más bajos de la región”
El Comité de la Unión Cívica Radical (UCR) de General Pinto cuestionó en las últimas horas a la administración local del intendente “Freddy” Zavatarelli, al asegurar que los empleados municipales de la comuna perciben “los salarios más bajos de la región”.
De esta manera, el radicalismo local puso en duda el reciente anuncio del jefe comunal, quien tras confirmar un nuevo incremento, precisó que los aumentos alcanzaron el 95,27% en el acumulado anual.
Sin embargo, la UCR pintense aseguró, a través de un comunicado, que en realidad se trata de un aumento “insignificante” y se hizo eco del supuesto “rechazo” de los propios trabajadores al anuncio municipal.
En esa línea, el Comité ofreció un relevamiento propio en los municipios de Lincoln, Junín, General Arenales, Leandro N. Alem y Carlos Tejedor, “para comparar los ingresos” y “aportar información objetiva” a la discusión.
“En esta idea, se tuvo en cuenta la mensualidad de un personal ingresante administrativo y de 30 horas semanales, obteniendo como resultado, que en la Región los empleados perciben salarios superiores al Mínimo Vital y Móvil, establecido por el Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social de la Nación de $57.900 al mes de noviembre”, aseguró el Comité, todavía presidido por Horacio Volpe.
Y agrega: “Evidentemente, los ingresos de los municipales de General Pinto son muy bajos, siempre van atrás de los índices de la inflación y cada vez se produce mayor pérdida del poder adquisitivo frente a la espiral inflacionaria, fundamentalmente en los productos de la canasta familiar”.
Asimismo, la UCR insistió en que “dentro del relevamiento efectuado en los distritos, se constató que en la gran mayoría de los distritos, se ha previsto otorgar en el mes de diciembre bonos extraordinarios desde $15.000 en adelante, e inclusive varios intendentes han resuelto recortar sus propios sueldos hasta en un 30% para ser coherentes con la difícil situación y ponerse a la altura de los que menos tienen”.
“Frente a este cuadro de situación, las autoridades deberían propiciar ámbitos de diálogos con los empleados y asimismo escuchar sus reclamos, arbitrando los medios necesarios, para mejorar sus ingresos y poder finalizar el año, sin tanto estrés económico”, concluye el escrito.