El vicegobernador Salvador habló con los autoconvocados de Mones Cazón y buscan declarar el Desastre Agropecuario
Una nueva asamblea de vecinos autoconvocados tuvo lugar ayer en la localidad de Mones Cazón, para volver a reclamar ante el gobierno de la provincia de Buenos Aires por la angustiante situación hídrica que continúa poniendo en riesgo a la población y amenazando a los campos de la zona. La jornada destacó por la visita de dirigentes de la Unión Cívica Radical (UCR) de Pehuajó, entre ellos, el presidente del comité, Pedro Goldenberg, quien fue el encargado de contactar a los asambleístas con el vicegobernador bonaerense, Daniel Salvador.
Los habitantes de Mones Cazón están en vilo desde comienzos del año por el creciente ingreso de masas de agua que mantienen inundados los campos y perjudican la economía de la localidad, dependiente casi en su totalidad de la actividad agrícola-ganadera. El reclamo de los autoconvocados sostiene la necesidad de que la provincia de Buenos Aires decrete la Emergencia Agropecuaria en la región, para que luego en la Legislatura se declare a la zona como en situación de Desastre y se instrumenten las medidas necesarias para paliar la crisis.
“En lo que va del año llovieron más de 1000 milímetros, lo que supera largamente la media anual, que es de unos 750 milímetros. Esto ya es de por sí un problema, pero que se suma a que desde febrero están entrando grandes cantidades de agua desde el sur de nuestro distrito, más precisamente desde Daireaux y Henderson”, explicó a La Quarta Horacio Otero, productor agropecuario y miembro de los autoconvocados de Mones Cazón.
“Somos una localidad pequeña, de unos 1800 habitantes, que vivimos de la actividad agrícola-ganadera, tanto los que tienen campo como los que no tenemos. Todos dependemos del campo y estamos muy preocupados. Hay varias hectáreas bajo agua, pero las consecuencias más graves aún no se han notado, porque la cosecha de este año se pudo recolectar, pero en lo inmediato no se va a poder sembrar trigo ni cosecha gruesa, que es el fuerte de la región”, agregó.
Por otra parte, Otero confirmó que pudo entablar una comunicación telefónica con el vicegobernador Salvador, quien a su vez se comprometió a contactarlo con el sub secretario de infraestructura Hidraúlica bonaerense, Rodrigo Silvosa, para evaluar posibles soluciones de corto plazo.
“El vicegobernador nos dijo que hablará con Silvosa, para que se acerque hasta nuestra localidad. Sabemos que las obras necesarias que puedan resolver este problema no son inmediatas. Reclamamos el canal al sur de la Ruta N°5, que forma parte del saneamiento del Salado. Pero por el momento, lo que estamos gestionando es un paliativo para los problemas económicos y sociales que inevitablemente va a sufrir nuestra comunidad”, insistió Otero.
“Desde hace un tiempo venimos bregando porque se declare la zona en Emergencia Agropecuario y luego el Desastre Agropecuario. No lo hemos logrado hasta ahora, pero Salvador prometió seguir la situación de cerca para lograr que se reúna la comisión de Emergencia Provincial y se trate el problema de esta región. En la próxima semana veremos si hubo algún resultado en esta gestión”, reiteró.
Similares fueron las palabras de la concejal radical, y vicepresidenta del bloque de Cambiemos en el Concejo Deliberante pehuajense, Andrea Lluch, quien remató: “El agua está ahí y no se va a ir. La prioridad es gestionar la Emergencia Agropecuaria y luego el Desastre”.