Battistella admitió su malestar por la decisión de los concejales de la UCR de integrar el bloque Cambiemos
Las heridas en el sector de la Unión Cívica Radical (UCR) de 9 de Julio que responde al ex intedente Walter Battistella, luego de que se oficializara la integración de los concejales del partido al bloque homogéneo de Cambiemos, aún no cicatrizan.
En los últimos días, desde la Agrupación Raúl Alfonsín, liderada por el ex jefe comunal, expusieron a través de un comunicado público, enviado al presidente de la filial local del partido, Rodolfo Menéndez, su disconformidad por la decisión que tomaron los representantes radicales en el Concejo Deliberante, supuestamente “sin antes haberlo debatido en el seno del Comité”.
“No buscamos que se rompa Cambiemos, pero sí que nuestros concejales puedan discutir proyectos y aportar sus inquietudes y necesidades de la comunidad”, declaró el propio Battistella, habida cuenta de que el escenario actual del órgano deliberativo presenta un total de once ediles que responden al intendente Mariano Barroso, lo que lo convierte en una “escribanía” de Cambiemos.
Las controversias se volvieron cada vez más fuertes tras las pasadas elecciones legislativas del 22 de octubre, cuando Battistella aseguró sentirse preocupado por la posibilidad de que la UCR quedara relegada dentro del esquema de poder de Cambiemos frente al PRO. “(El radicalismo) está un poco desarmado, mucho más por su trayectoria, y lo vivo con una desazón importante, porque mas allá de que estamos dentro de este frente Cambiemos, (la UCR) no tiene la representación que necesita y temo que el partido pueda tener un problema de reducción de sus fuerzas”, había expresado el ex intendente por entonces, en una entrevista con El Regional Digital.
Más tarde, en un plenario realizado el 27 de noviembre, el enfrentamiento entre Battistella y el actual diputado provincial oriundo de la ciudad, Jorge Silvetre, quedó más expuesto que nunca. “Si estuviésemos nosotros en el poder, tendríamos la misma actitud. No pidamos al otro lo que no somos capaces de hacer”, exclamó entonces el legislador, en alusión a que el escenario político actual ameritaba que la UCR aceptara circunstancialmente su papel de reparto con el fin de evitar el quiebre de Cambiemos.
De cualquier forma, a nivel provincial existió una bajada de línea contundente, desde la gobernadora María Eugenia Vidal pero con el aval del vicegobernador, el radical Daniel Salvador, para que se evitaran los interbloques UCR-Cambiemos en los distritos y se tendiera a consolidar bancadas puras de Cambiemos. En la Cuarta Sección Electoral, varios municipios acataron la directiva que llegó desde Provincia. En algunos casos, como en Bragado, la edil radical Laura Pico optó por rebelarse y constituir un unibloque radical. En 9 de Julio, en cambio, la voluntad provincial sólo pudo cumplirse a costa de daños colaterales.